“Fue un momento muy feo, la
sentí muy exaltada a Ritó. No pensé que se iba a mandar de esa manera. Hemos hablado con la producción que esto no puede suceder más. Lo de anoche fue una cosa inesperada, de hecho yo trataba de sacarle el micrófono pero lo agarraba también. Es muy difícil en un programa en vivo. Se llega a un lugar que no estuvo bueno. Lo que no está bueno es bajarle un punto a los concursantes que agredan al jurado. Pero coincido que un límite hay que poner”, señaló el conductor.
Moria, la principal atacada por la vedette, tomó la palabra a continuación: “No necesito disculpas porque no me ofendió. Me pareció que tuvo como un brote psicótico y tengo compasión con las personas enfermas. No me ofendió porque me pareció que era una mujer sacada. Pero la entiendo porque creo que está enferma y le deseo lo mejor en su recuperación. Metió a mi hija, un montón de cosas. No acepto las disculpas porque no me sentí ofendida”, indicó.
Con respecto a su rol de jurado, dijo: "Soy muy neutral y justa en mis evaluaciones".
Además, le sugirió una propuesta a la producción: "Focaliza en mí al demonio. A ella eso no se le va a pasar y a mí no se me va a pasar que baila mal. Que la producción evalúe si quiere que la puntúe otra persona".
Por último, Nacha Guevara opinó que “ayer se cruzó una línea, de lo personal, de personas que no tienen nada que ver de lo que estaba pasando y de la ofensa a un compañero de trabajo. El mejor límite es el de tu autoridad, Marcelo”.
"Mi humilde opinión es que no estoy de acuerdo en bajar un punto porque si mañana viene un virtuoso que está para 10 y porque hable mal de mí no le vamos a bajar el puntaje", sintetizó Marcelo Polino.
Tinelli, para tranquilizar al jurado, finalizó: "Ayer se excedió un límite y esto no puede suceder más pero no estoy de acuerdo en que se baje el puntaje".
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