Los candidatos a presidente con Tinelli en ShowMatch 2015

Marcelo Tinelli volvió a la televisión con picos de 36 puntos de rating, y una vez más dejó en claro que es el rey de la televisión argentina, y que cada año apuesta por sorprender más y más.

Además, Tinelli se dio el lujo de actuar con su hija Juanita y Graciela Borges, y tener a los tres principales candidatos a presidente: Daniel Scioli, Mauricio Macri y Sergio Massa.


Scioli fue el primero en entrar a escena del brazo de su esposa Karina Rabolini, cuando faltaban segundos para las doce de la noche. “Un amigo personal, lo conozco hace treinta años”, lo recibió Tinelli, tras contar que eran vecinos y le pedía casetes prestados. Scioli pasó al presente con un guiño: “Vos soñando con presidir la AFA, yo con presidir la Nación”.

“Construyamos sobre lo que hemos avanzado”, dijo el gobernador. Su imitador, Fredy Villarreal, entró seguido por el equipo de fútbol de La Ñata, y el boxeador campeón que apadrina Scioli. Rabolini se animó a bailar el tango con Villarreal.

El segundo turno fue para Macri y su mujer, Juliana Awada. “Estamos para más, nos merecemos vivir mejor”, sostuvo ante idéntica pregunta de para qué ser Presidente. Contó que una de sus hijas le dice “estás medio loco” por sus aspiraciones, pero “yo amo este país”. Macri vistió “canchero” con jeans y zapatillas y bailó con su imitador Martín Bossi, que si bien usó con gracia expresiones en inglés -reales o inventadas, parodiando el origen social del ingeniero- no habló “cheto” como en anteriores caracterizaciones de Macri, quien busca ampliar su base popular.

También Massa entró con su esposa Malena Galmarini. “Fuimos de menor a mayor, yo era un poquito más mujeriego”, reveló Massa el origen del noviazgo, empujado por las preguntas “picantes” de Tinelli. Massa fue el más explícito sobre medidas que adoptaría. Puso en agenda la violencia de género y la pobreza; y reclamó que se de el debate presidencial. Su imitador fue el actor uruguayo Roberto Peña. Las tres esposas tuvieron un rol preponderante, y hacia ellas Tinelli dirigió buena parte de los cuestionarios. Ellos pudieron reposar en imitaciones cuidadas que no los incomodaron.